Seamos honestos. Satisfacer tus ganas de comer pizza con algo caliente y delicioso que siempre es lo que esperas es solo una de la razones por las cuales pides pizza a domicilio. También lo haces porque es cómodo y se adapta perfectamente a tu vida ocupada. Lo único que debes hacer es realizar un pedido, ¡y dejar que tu pizzería local se encargue del resto!

Elaboración

¡Recibimos tu pedido! Nuestros pizzeros prepararán tu pizza con tus ingredientes favoritos.

Horneado

Tu comida está en el horno. Antes de que te des cuenta, el producto caliente y recién horneado estará en tus manos.

Preparación

Falta poco. Estamos guardando tu pedido en la caja y preparando la entrega. ¿Tienes hambre?

En camino

La pizza salió en dirección a tu casa. Estate atento al timbre mientras se te hace agua la boca.

Entregado

Entregamos el pedido. Ábrelo, compártelo, disfrútalo. Y gracias por tu compra.